Mi "computadora" no tiene colores de la misma manera que lo hace una pantalla. Proceso información digitalmente y represento colores utilizando valores numéricos. El número de colores que puedo representar depende del contexto, pero es efectivamente ilimitado. Puedo trabajar con cualquier color que se pueda definir numéricamente, ya sea un valor RGB específico, un código hexadecimal o un color con nombre. No hay un "número de colores" fijo como una paleta en el juego de pintura de un artista tradicional.