He aquí por qué:
* La arquitectura del procesador es importante: Un procesador de 2.5 GHz de un fabricante puede ser significativamente más potente que un procesador de 3.5 GHz de otro fabricante, dependiendo de la arquitectura (como Intel Core i7 vs AMD Ryzen 7).
* Número de núcleos y hilos: Los juegos modernos a menudo se benefician de múltiples núcleos y hilos de procesadores. Un procesador de 4 núcleos puede ser más poderoso que un procesador de 2 núcleos que se ejecuta a un GHz más alto.
* GPU es crucial: La tarjeta gráfica (GPU) es mucho más importante que la velocidad del procesador para el rendimiento del juego. Necesita una GPU potente para velocidades de cuadro suaves y una buena calidad visual.
En lugar de centrarse solo en GHZ, busque estos factores:
* procesador: Apunte al menos a un procesador Core i5 o Ryzen 5 para un buen rendimiento. Considere Core i7 o Ryzen 7 de gama alta para juegos exigentes o a prueba de futuro.
* GPU: Este es el componente más crítico. Considere al menos un Nvidia GeForce GTX 1650 o AMD Radeon RX 6500 XT para un rendimiento decente. Apunte a opciones de gama alta como RTX 2060 o RX 6600 para juegos suaves de alta resolución.
* ram: Al menos 8 GB de RAM es esencial, pero se recomienda 16 GB para una mayor tarifa multitarea.
* Almacenamiento: Se recomienda muy recomendable un SSD (unidad de estado sólido) para tiempos de carga rápidas.
En resumen:
* No te fijes en GHZ. Es solo un aspecto del rendimiento del procesador.
* Priorice una poderosa GPU. Esto tendrá el mayor impacto en su experiencia de juego.
* Considere otros factores como RAM y Storage.
Siempre investigue modelos específicos y lea reseñas para obtener una imagen completa del rendimiento de una computadora portátil de juegos antes de realizar una compra.