* Usuario minimalista (navegación web básica, correo electrónico): Un SSD de 128 GB puede ser suficiente, aunque necesitaría tener mucho cuidado con lo que instala y almacena. Es probable que se quede sin espacio rápidamente si instala muchas aplicaciones o descarga muchos archivos.
* Usuario casual (navegación web, algunos consumo de medios, algunos juegos): Un SSD de 256 GB o un HDD/SSD de 512 GB sería más cómodo. Todavía necesitará administrar su almacenamiento, pero tendrá significativamente más margen de maniobra.
* Usuario de energía (muchos juegos, fotos/videos de alta resolución, desarrollo de software): 512GB SSD o un SSD 1TB (o incluso un SSD más grande) es un buen punto de partida, e incluso eso puede sentirse apretado según su uso. Considere un SSD de 2TB o más si almacena archivos grandes o muchos juegos.
* Usuario profesional/creativo (edición de video, modelado 3D, etc.): A menudo se necesitan varios terabytes de almacenamiento, a menudo empleando un SSD rápido para el sistema operativo y los programas utilizados con frecuencia y un HDD grande o SSD adicional para el almacenamiento de grandes archivos multimedia.
Cosas a considerar:
* Sistema operativo: Windows, macOS y otros sistemas operativos ocupan un espacio significativo.
* Aplicaciones: Los programas, especialmente los juegos, pueden ser bastante grandes.
* Archivos: Documentos, fotos, videos y música consumen espacio.
* Máquinas virtuales: Ejecutar máquinas virtuales requiere un almacenamiento sustancial.
En lugar de preguntar "cuánto es muy poco", pregúntese:
* ¿Qué programas estaré ejecutando?
* ¿Cuántos archivos almacenaré?
* ¿Cuál es el tamaño de esos archivos (fotos, videos, juegos)?
* ¿Con qué frecuencia elimino archivos antiguos?
Al considerar estos factores, puede determinar mejor la cantidad adecuada de espacio de disco duro para sus necesidades. Correr mínimo en el espacio del disco duro puede afectar significativamente el rendimiento, por lo que es crucial tener suficiente.