Lo que necesitarás:
* Una computadora: Esto debería tener una unidad de CD-RW.
* Un disco CD-RW: Estos son reutilizables, por lo que puede quemarles varias veces.
* Las fotos que desea copiar: Estos deben almacenarse en su disco duro.
Pasos:
1. Inserte el disco CD-RW: Coloque el disco en la unidad de CD-RW de su computadora.
2. Abra el software de grabación de CD-RW: La mayoría de las computadoras tienen software incorporado de quema de CD-RW. Puede encontrarlo en "My Computer" o "Esta PC", hacer clic con el botón derecho en la unidad CD-RW y elegir "Abrir". Si no, puede descargar software gratuito como IMGBURN o CDBURNERXP.
3. Elija "Data Disc" o "CD-ROM (UDF)": Esto asegura que las fotos se guarden en un formato compatible con la mayoría de las computadoras.
4. arrastre y suelte sus fotos: Localice sus fotos en su disco duro y arrastrelas a la ventana del software de grabación. Puede seleccionar varias fotos a la vez.
5. Organice sus fotos (opcionales): Puede crear carpetas en el CD-RW para organizar sus fotos por fecha, evento o cualquier otra forma que desee.
6. Comience el proceso de quema: Haga clic en el botón "Burn" o "Escribir" en el software de grabación.
7. Espere a que termine la quemadura: Esto puede tomar unos minutos dependiendo de la cantidad de fotos que esté quemando y la velocidad de su unidad de CD-RW.
8. Expulsar el disco CD-RW: Una vez que se complete la quemadura, expulse el disco de su computadora.
Consejos adicionales:
* Etiqueta su CD-RW: Use un marcador permanente para escribir en el disco, para que pueda identificar fácilmente las fotos más adelante.
* Haga una copia de seguridad de tus fotos: Siempre es una buena idea hacer una copia de seguridad de sus fotos en múltiples ubicaciones, como un disco duro externo o almacenamiento en la nube.
* Prueba tu CD-RW: Después de quemar, inserte el disco en otra computadora para asegurarse de que se pueda acceder correctamente a las fotos.
Nota importante: Los discos de CD-RW no son tan duraderos como otras opciones de almacenamiento, como discos duros externos o almacenamiento en la nube. Pueden dañarse con el tiempo y son más susceptibles a los rasguños. Si necesita mantener sus fotos seguras durante mucho tiempo, considere usar un método de almacenamiento más confiable.