* descarga de corona: Un cable de corona aplica una carga negativa uniforme al tambor fotorreceptor. Este cargo atrae al tóner, que se carga positivamente. Sin embargo, la * cantidad * de carga se controla cuidadosamente. Demasiada carga conduciría a una adhesión excesiva de tóner, y muy poco daría lugar a una transferencia de tóner insuficiente.
* Control de rodillos de desarrollador: El Roller de desarrollador, que contiene el tóner, también se controla cuidadosamente. Factores como la velocidad del rodillo, la presión contra el tambor y la cantidad de tóner en la unidad de desarrollador están optimizados para depositar la cantidad correcta de tóner.
* Conjunto de cuchilla/cuchilla de limpieza: Después de que la imagen se transfiere al papel, una cuchilla de limpieza (a veces llamada cuchilla de limpiaparabrisas o conjunto de limpieza) raspa cualquier tóner restante del tambor. Esto es crucial para prevenir la acumulación de tóner y garantizar una calidad de impresión constante en los ciclos de impresión posteriores.
* Material de batería y recubrimiento: El tambor fotorreceptor en sí está hecho de un material (a menudo un fotoconductor orgánico o un tambor a base de selenio) con un recubrimiento específico diseñado para optimizar la adhesión y liberación del tóner. El recubrimiento ayuda a controlar la carga electrostática y facilita el proceso de limpieza.
* Propiedades del tóner: El tóner en sí juega un papel. Su tamaño de partícula, carga y composición de resina están diseñadas para proporcionar una adhesión óptima al tambor cargado, pero también permiten una transferencia eficiente al papel y la eliminación de la cuchilla de limpieza.
En esencia, es un sistema cuidadosamente equilibrado de fuerzas electrostáticas, raspado mecánico y propiedades de material que trabajan juntas para garantizar que la cantidad correcta de tóner se adhiera al tambor, se transfiera al papel y luego se limpie. Cualquier desequilibrio en estos factores puede conducir a problemas de calidad de tóner o calidad de impresión.