1. Secado de tinta: Los cartuchos de inyección de tinta están diseñados para usarse en un entorno sellado. Cuando se expone al aire, la tinta puede secarse rápidamente, obstruir las boquillas de los cabezales de impresión y hacer que el cartucho sea inutilizable.
2. Daño al cartucho: Las partes delicadas del cartucho, como el cabezal de impresión, pueden dañarse por el polvo, la suciedad y la humedad cuando se exponen al medio ambiente.
3. Fuga de tinta: Dejar el cartucho afuera puede hacer que la tinta fugas, manchando las superficies y potencialmente dañando el cartucho en sí.
4. Peligros ambientales: Los cartuchos de tinta contienen productos químicos que pueden ser dañinos para el medio ambiente. Dejarlos afuera aumenta el riesgo de que se filtren en el suelo o el agua.
5. Disminución de la calidad de impresión: Si la tinta se seca o el cabezal de impresión está dañado, dará como resultado una mala calidad de impresión, incluidas rayas, colores desteñidos y líneas faltantes.
En lugar de dejar cartuchos de tinta afuera, esto es lo que debe hacer:
* Gócalos en un lugar fresco y seco. Idealmente, el cartucho debe almacenarse en el embalaje original o en un recipiente hermético.
* Manténgalos alejados de la luz solar directa y el calor. Estos elementos pueden acelerar el proceso de secado de la tinta.
* Use los cartuchos dentro del plazo recomendado. Esto generalmente se imprime en el embalaje del cartucho.
Siguiendo estos simples pasos, puede ayudar a asegurarse de que sus cartuchos de tinta permanezcan en buenas condiciones y que obtenga la mejor calidad de impresión posible de su impresora.