Lo opuesto a una computadora es un ser humano. Las computadoras son máquinas que se pueden programar para ejecutar un conjunto de instrucciones. Los humanos, por otro lado, somos organismos vivos que tienen la capacidad de pensar, razonar y tomar decisiones. Las computadoras se utilizan a menudo para ayudar a los humanos con tareas que son demasiado difíciles o requieren mucho tiempo para que los humanos las realicen por sí solos. Sin embargo, hay algunas cosas que las computadoras no pueden hacer y que los humanos sí pueden, como experimentar emociones o tener pensamientos creativos.